Por: Manuel Sarmiento Fradera
Aguacate es el nombre común
con que se conoce a esta generosa planta de la familia de las lauraceas; deriva
del náhuatl ahuácatl, que significa testículo, probablemente por la forma
colgante del fruto. La Persea americana, nombre científico de la principal
especie cultivada, es originaria de las zonas altas del centro y del este de
México, así como de las partes altas de Guatemala.
El aguacate es uno de los muchos regalos que
México ha dado al mundo. Su sabor, textura y propiedades alimenticias han
cautivado a innumerables países que con gusto lo han adoptado, como Francia y
otros tan lejanos como Japón. Y es que el mexicanísimo aguacate lleva
conquistando paladares de todo el mundo desde hace 500 años. Un ejemplo de ello
nos lo da Martín Fernández de Enciso en su Suma de Geografía, publicado en
Sevilla en 1519: “lo que hay dentro [del fruto del aguacate] es como
mantequilla, tiene un sabor delicioso y deja un gusto tan blando y tan bueno
que es maravilloso”.
Pero ¿qué hace que el aguacate sea algo tan
especial? Para empezar, lo más evidente: sin duda su extraordinario sabor,
peculiar consistencia, color y su asombrosa versatilidad culinaria, ya que
puede ser saboreado de maneras tan sencillas como sobre pan calientito con una pizca
de sal, como aditamento en una quesadilla, en tacos o en sopas, cremas,
guisados a base de salsa de aguacate y, por supuesto, en guacamole, símbolo
internacional de México.
El aprovechamiento del árbol del aguacate es
integral, ya que su madera es de buena calidad y en zonas rurales se le utiliza
para la elaboración de yugos. La industria también obtiene beneficios del
aguacate, pues se le utiliza para obtener aceites, lociones, jabones, cremas y
champús para el cabello.
Además, su cultivo trae innumerables beneficios
económicos a un amplio sector de la población rural y semiurbana de varios
estados de la República.
Es común ver en casas de estados como Michoacán
un árbol de aguacate para el autoconsumo familiar, o algunas huertas cuyos
frutos tienen la venta asegurada en la misma puerta de la casa o en el mercado
local. Pero el cultivo del aguacate es importante a nivel nacional, ya que
México es el primer productor mundial con más del 34% de la producción, y
Michoacán el estado número uno con más del 80% de la cosecha nacional.
Una parte importante del aguacate nacional se
destina a la exportación, cuyo principal mercado es Estados Unidos con casi 10
mil toneladas, país que mantuvo cerrada su frontera desde 1914 hasta noviembre
de 1997; seguido muy de cerca por Francia con 9 500 toneladas y Japón con más
de 8 mil. Sin embargo, si consideramos la cantidad de aguacate mexicano que se
consume en el extranjero desde 1990, Francia ocupa el primer lugar, seguido por
Canadá, y en tercer lugar Japón.
Es claro, entonces, que el aguacate, además de
haber conquistado paladares de todo el mundo, es un producto del que se
obtienen importantes divisas para el desarrollo del campo, y ello con una
actividad de bajo impacto para el entorno ecológico.
Otro aspecto relevante es que no hay sólo un
aguacate, sino diferentes variedades con formas, colores, texturas y sabores
propios. De las tres especies primigenias (mexicana, guatemalteca y antillana)
se derivan variedades adaptadas a cada condición de cultivo, dando frutos con
sabores, texturas, colores y olores variados. Hay quienes prefieren el sabor
más fuerte de la variedad criolla, el aguacate pequeño de cáscara negra, o
quienes optan por la abundante pulpa de sabor más suave del Hass, o la
increíble facilidad de pelar de la variedad fuerte.
Con todo ello, resulta tentador no sólo comer
unos taquitos con guacamole, sino poseer un arbolito para tener aguacates
frescos y de “primera mano”. El aguacate se adapta a diferentes climas y
suelos; prácticamente sólo lo restringen su susceptibilidad a las heladas
(crece en climas de subtropical a templado), al encharcamiento de agua en su
base, a suelos muy duros o compactados, o a zonas con contaminación ambiental
severa. Si usted vive en una zona apta y tiene el espacio necesario para el
desarrollo de un arbolito, no lo dude y benefíciese de una de las mejores
frutas que posee nuestro país. Además, plantar un árbol siempre es fuente de
vida y salud para usted, su familia, la comunidad y para México.
EL AGUACATE EN LA HISTORIA
Este delicioso fruto es bien conocido por el
hombre desde hace milenios, así lo muestran las evidencias más antiguas de su
consumo provenientes de una cueva de Coaxcatlán, Puebla, con una antigüedad de
7 000 a 8 000 años.
Las culturas precolombinas contaban con un buen
conocimiento sobre el aguacate, como se observa en el Códice Florentino, donde
se mencionan tres tipos principales: aoácatl, quilaoácatl y tlacacoloácatl, que
por su descripción podrían equivaler a las tres especies principales de esta
planta: mexicana, guatemalteca y antillana, respectivamente.
Otras fuentes corroboran la importancia de la
cucata, nombre totonaca del aguacate, como en el Códice Mendocino, donde el
árbol de este fruto se representa en un jeroglifo que indica el pueblo de
Ahuacatlán. De hecho, hoy en día hay numerosos lugares y poblaciones cuyo
nombre está ligado a esta fruta, como Ahuacatenango, Chiapas, “en el recinto de
los aguacates”; Ahuacatepec, Veracruz, o Aguacatitlán, Guerrero, Jalisco y
Estado de México, “lugar de aguacates”.
Después de la conquista, la cupanda, nombre
purépecha del árbol de aguacate, fue introducido en España en 1600 y de ahí se
diseminó a todo el mundo con las condiciones ambientales para su desarrollo,
llegando a Cuba en 1700, a Brasil en 1809, a África en 1870, a la India en
1892, a Nueva Zelanda en 1910, y a la región que hoy ocupa Israel en 1931.
SUS PROPIEDADES
El yashu, nombre zapoteca del aguacate, es
fuente importante de vitaminas A, C, E, tiamina (vitamina B1), calcio, hierro,
magnesio, zinc y otros minerales, que lo hacen un “multivitamínico” natural y
muy sabroso. Más aún, la pulpa del aguacate posee la extraordinaria propiedad
de ayudar a eliminar el colesterol “malo”, es decir las lipoproteínas de baja
densidad, por lo que ayuda a reducir el riesgo de desarrollar arterosclerosis,
la temible enfermedad del mundo sedentario de hoy; adicionalmente, se ha
observado un efecto benéfico en pacientes con asma y artritis reumatoide.
Tales propiedades curativas han sido probadas y
comprobadas durante milenios en la medicina tradicional de nuestro país. El
tzitzito, nombre que recibe el aguacate en ciertas regiones de Chiapas, se
utiliza para eliminar microbios y parásitos, las semillas como antihelmíntico y
molidas contra la sarna, las hojas en infusión como expectorante, incluso se
dice que la energía de la pulpa, combinada con sus vitaminas y minerales, le
dan propiedades afrodisíacas.
Fuente: México desconocido No. 308 / octubre
2002
Producción de aguacates
México es el primer productor
mundial de aguacate, su producción representa más del 30% de la cosecha mundial.
Dentro de la República Mexicana, Michoacán es el estado que más aguacates produce, y son de
excelente calidad, por lo que casi todos se destinan a laexportación.
Los países que más nos compran son Francia, Canadá,Japón y Estados Unidos.
En la siguiente tabla está la producción de
aguacate por estado en enero de 2012. Calcula el porcentaje que produce cada
estado y genera una gráfica con estos datos.
Estado
|
Aguacate producido (toneladas)
|
Guerrero
|
1,940
|
Jalisco
|
8
|
Michoacán
|
74,217
|
Oaxaca
|
744
|
Sinaloa
|
20
|
Total
|
76,929
|
Producción mundial de aguacate
A continuación te presentamos una gráfica
con losprincipales países productores de aguacate. Como ves, hay un
área que dice Resto del mundo, en ella se incluye
la producción de 62 países, y ninguno produce
más del 5% del total.
Principales países productores de aguacate en
2010 (Fuente: FAO)
¿De dónde viene?
Aunque hay discrepancias sobre el origen del
aguacate, la evidencia más antigua de su consumo que se tiene hasta ahora está
en una cueva de Coaxcatlán, Puebla, con una antigüedad de siete mil a ocho mil años.
En el Códice Florentino se mencionan tres tipos principales de aguacate: aocátl, quilaoácatl ytlalcaloácatl,
que por su descripción se supone que se refieren a las tres variedades
principales de esta planta: mexicana, guatemalteca y antillana,
respectivamente.
En el Códice Mendocino aparece el árbol que indica el pueblo
de Ahuacatlán que significa: lugar donde abunda el aguacate.
Hoy en día hay muchos lugares cuyo nombre
está ligado a esta fruta, como Ahuacatenango, Chiapas, que
significa: En el recinto de los aguacates; Ahuacatepec, Veracruz, o Aguacatitlán, en Guerrero, en
Jalisco y en el Estado de México. Todos ellos quieren decir Lugar de
los aguacates.
Después de la conquista, el aguacate viajó a
España y de ahí se esparció por todo el mundo. Ahora se siembra en Cuba,
Brasil, África, India y Nueva Zelanda.
Aguacate viene del náhuatl ahuacatl, que significa testículos, por la forma en que cuelgan los frutos de la rama.
Aguacate viene del náhuatl ahuacatl, que significa testículos, por la forma en que cuelgan los frutos de la rama.
No hay comentarios:
Publicar un comentario